lunes, 17 de noviembre de 2014

A LA PREGUNTA DE POR QUÉ TE QUIERO - VICENTE LUIS MORA

Porque la tesis va después del casus
porque la lluvia llega del oeste
el sol del este y éste del ocaso
te quiero porque baja la marea
y sube porque el cielo no es azul
te quiero porque el mar rompe en la costa
porque el amor la gravedad la muerte
hacen caer los cuerpos a la tierra
porque las nubes son en movimiento
y mueren como peces si se paran
porque la niebla es agua en suspensión
porque las cosas pasan y el reloj
no acierta nunca con la hora exacta
porque la rosa ya cortada muere
te quiero porque el átomo de cesio
es firme y el genoma variable
te quiero porque el sol calienta el aire
te quiero porque el cero es absoluto
porque mañana volarán las aves
porque hoy se acaba y esta noche es triste

casas vacías camas anchas frío

preguntas insensatas por teléfono


domingo, 9 de noviembre de 2014

NOVIEMBRE - JULIO RODRÍGUEZ

Ha pasado el cometa y ha dejado
un vacío en la noche exorbitante,
un vacío mayor que si no hubiera
sucedido el prodigio. ¡Quién pudiera
olvidarlo! ¡Quién pudiera olvidar!

El hombre entristecido por la ausencia
se pregunta si quedan
restos aún, algún tenue pedazo
de aquél amor más fuerte que los otros,
de aquellos corazones enlazados
en medio del espacio, cuando el tiempo
detenía su marcha y los alzaba
más allá de su exacto mecanismo;
se pregunta si permanece el eco
de la palabra limpia y espontánea,
la humedad en los cuerpos sosegados,
la resaca de festejar los días.
Y, al fin, el hombre entristecido puede
notar las ascuas en su entraña fría:
algo arde todavía en el glaciar
en que se ha convertido el escenario
donde hace poco amaba sin descanso.
El amor sabe bien que su destino
es desaparecer, pero se empeña
en mantener la llama con pavesas.
Y a esa parva ilusión ató sus sueños
el hombre abandonado,
aun siendo tan inútil la esperanza
como el sol de finales de noviembre.